No hay nada más devastador que perder un hijo. Pero en medio de tan terrible pérdida, Amy tomó una decisión que salvó muchas vidas. El corazón, hígado y riñones de Nicole, hija de Amy, fueron donados a personas que necesitaban un trasplante para poder seguir viviendo. Gracias a esta generosa donación, varias personas pudieron tener una segunda oportunidad de vida.
Mandee es una de esas personas. Ella padecía de una cardiopatía congénita, y al recibir el corazón de Nicole, Mandee volvió a nacer. En 2003, Mandee fue una de las madrinas de boda de la hermana de Nicole.
“Donor Alliance ha sido una cuerda salvavidas”, dijo Amy. “Estuvieron con mi familia durante nuestro doloroso duelo y nos siguen brindando su apoyo hasta el día de hoy. Casi 10 meses después de la muerte de Nicole asistí a un taller de Donor Alliance para aprender a contar su historia.
Siempre supe que donar era lo correcto, pero hasta ese momento nunca supe realmente cuánta gente muere en espera de órganos. Ese fue el día en que me di cuenta de lo abstraída que estaba en la tragedia de la muerte de Nicole; tanto que había olvidado que gracias a ella tres personas tuvieron una segunda oportunidad de vida. Realmente tomé conciencia de que algo bueno surgió de esta tragedia.
“Saber que Nicole salvó tantas vidas con su donación, le da mucha paz y tranquilidad a mi corazón.”